Como ya sabemos, el método Singapur en las matemáticas se
centra en la comprensión, ya que el aprender fórmulas sin ningún sentido, no
llevará a ningún aprendizaje significativo. Es de gran importancia tener en
cuenta los gustos e intereses de nuestros alumnos. Como en todos los métodos
existen diferentes fases para lograr el aprendizaje, y son las siguientes:
1.
Preparación: en la que
los maestros han de evaluar los conocimientos previos que tienen los alumnos
para poder verificar si están o no preparados para el nuevo aprendizaje o si,
por el contrario, es necesario trabajar más algunas habilidades y conceptos.
Para empezar un nuevo conocimiento es necesario también que
el profesor cree un ambiente en el aula propicio para aprender, es decir, que
motive a los alumnos y sobre todo que entre los alumnos haya un clima de respeto
para que todos se sientan libres para aportar sus propias ideas.
2.
Compromiso: es la fase
más importante ya que es donde los alumnos adquieren los nuevos conocimientos y
conceptos. En este método se usan tres enfoques pedagógicos:
-
Aprendizaje basado en
actividades. Sostiene la idea de que como mejor se aprende es haciendo y no “hincando
los codos” como siempre se ha creído; lo importante es manipular materiales y
utilizar metodologías novedosas.
-
Investigación dirigida
por el profesor. El profesor no será el sujeto importante de las clases ni el más
importante, los más importantes son los alumnos. Por lo que el profesor será el
que guíe a los alumnos para que consigan explorar y encontrar las respuestas
adecuadas.
-
Instrucción directa:
los profesores dejan claro a los alumnos los objetivos y los contenidos que
tienen que aprender para que ellos mismos puedan centrarse en los aspectos más importantes.
3.
Maestría. Es la última
fase; aquí los profesores ayudan a los alumnos a consolidar y a establecer sus nuevos
conocimientos mediante tres recursos:
-
Práctica: ya que todo
conocimiento requiere repetición y ampliación de los distintos ejercicios que
se puedan formular para que el profesor tenga claro que el alumno sabe hacer
los ejercicios y que no es una mera casualidad que les haya salido el problema.
-
Revisión reflexiva: a
parte de estas actividades de práctica en la que los alumnos podrán repetir diferentes
ejercicios, también son necesarios ejercicios de reflexión sobre el nuevo
aprendizaje.
-
Aprendizaje extendido:
por último, existen otro tipo de ejercicios para los más atrevidos en los que
deberán ampliar su aprendizaje una vez que hayan comprendido bien los
anteriores.
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